Para decorar
Para la masa
Para la masa
Para el glaseado
Bate juntos azúcar glass, miel de maple y agua hasta que los ingredientes estén incorporados.
Coloca las rebanadas de tocino en un sartén frío y cocina a fuego medio para que queden bien crujientes y no pierdan su forma. Pica en trozos chicos y reserva.
Para las donas
Cierne harina, polvo para hornear, sal y nuez moscada; mezcla con las semillas de girasol molidas y reserva.
Coloca en el tazón de tu batidora el azúcar con la ralladura de naranja y revuelve con el aditamento de pala, para incorporar bien. Añade la mantequilla y bate por un minuto en velocidad baja. Integra los huevos y vuelve a batir por 1 minuto en velocidad media, hasta combinar perfectamente. Raspa los bordes del tazón según se necesite.
Incorpora los polvos al tazón de tu batidora en 3 partes, batiendo en velocidad baja y alternando con la crema (comienza y termina con los polvos); bate hasta obtener una masa pegajosa y homogénea.
Transfiere la masa lista a un tazón de vidrio cubierto con plástico adherible y refrigera por al menos 2 horas o hasta una noche.
Precalienta el aceite en una freidora o en un sartén profundo a 165 ºC.
Enharina tu superficie de trabajo y extiende la masa reposada hasta obtener 1 cm de grosor. Corta donas con ayuda de un cortador y vuelve a extender los sobrantes para cortar más donas. Ve colocando las donas en una charola con papel encerado y refrigera hasta que el aceite esté caliente.
Agrega dos donas a la vez en el aceite listo; una vez que floten dales vuelta y fríe por 2 minutos hasta que doren. Vuelve a darles la vuelta y cocina nuevamente por 2 minutos. Repite dos veces, disminuyendo el tiempo de cocción a 1 minuto por cada lado.
Transfiere las donas listas a una charola con rejilla para escurrir y enseguida báñalas con el glaseado y decora con el tocino y semillas de girasol al gusto.
Sirve las donas calientes y deja enfriar para disfrutar. Comparte.